Universalidad

Mírate a la mano, cada dedo levantado vale uno y si está bajado cero. Ya puedes contar hasta cinco. Cada dedo es diferente al otro pero eres capaz de darles el mismo valor. Solo necesitas una memoria para retener las sumas y un control de estado (levantado/bajado) que vigile cada dedo. Y ya estarías computando, generando una abstracción partiendo de un objeto físico y su movimiento.

Si el deforme de Chernóbil tiene seis dedos en una mano puede hacer cálculos que tu mediocre mano no puede entender. Puedes ganarle usando las dos manos pero estarás limitado, incluso duplicando poder de cálculo usando los dedos de los pies, seguirás tan lejos de poder contar hasta el infinito como al comienzo.

Lo mismo ocurría con las primeras imprentas y sus planchas de hierro. Da igual cuantos millones de planchas tengas que si tu competencia tiene alguna que tú no tengas podrá imprimir páginas que tú no. Sin embargo a ambos os faltarán infinitas planchas para poder crear todos libros que existen y existirán.

Y entonces llega el salto a la universalidad con las impresoras. Una impresora es universal si puede imprimir cualquier texto que cualquier otra impresora puede imprimir. Ya no hay página que tu competencia pueda crear y que tú no. Ya no tienes que acumular plantillas fijas, podrás imprimir cualquier historia que vaya a ser creada.

O es universal, o no lo es. No hay manera de acercase al infinito gradualmente, es un salto binario.

La impresora es universal en su dominio, la escritura. Y una calculadora es universal sumando números, al contrario de tus dedos que solo llegan hasta cinco. No importa el material con el que están construidos, su universalidad transciende al hardware empujando sus posibilidades al infinito.

Los ordenadores han llegado a ser universales a otro nivel, son universales a nivel de dominio. Ya no tienes que crear una maquina para cada tipo de problema. Un ordenador puede simular cualquier proceso físico o abstracto computable. Si puede existir lo puedes programar. Entra en la categoría de maquina Universal de Turing.

Un ordenador cuántico, un PC, la red de Ethereum y tu cerebro, los cuatro son maquinas universales. Una maquina de Universal de Turing puede hacer lo que el resto de maquinas de Turing pueden hacer. Todo. Cualquier computación que haga un ordenador lo puedes hacer en tu cerebro y viceversa. La diferencia está en la velocidad de cálculo y en la memoria.

Eso implica que los programas que corren en tu cerebro pueden correr en un ordenador. Tu consciencia, creatividad y emociones pueden ser programadas. Necesitamos entenderlas para programarlas pero no hay nada en esta realidad que no podamos entender y computar. Solo necesitamos construir el conocimiento adecuado.

Dios no puede albergar conocimientos que los humanos no podamos llegar a entender. Sería universal, como nosotros.

Y recuerda, no importa el material del que esté hecha la máquina, neuronas o chips de silicio. Puedes computar usando dedos, piedras o palos. Lo importante es la abstracción que se genera. Por eso lo que entiendes como "Yo" algún día lo entenderá un ordenador.